EL DESAFÍO DE HOY

El escenario global ha cambiado. Eso es un hecho innegable. Y la dimensión de cambio ha sido tan extensa, que nos ha invitado –o en algunos casos obligado– a modificar el modo de hacer las cosas; desde las situaciones más domésticas o rutinarias, pasando por el modo de relacionarnos con otros, llegando incluso a afectar la manera de hacer nuestro trabajo.

Hoy trabajamos desde casa. Con mayores o menores dificultades hacemos lo mismo que, hace un tiempo atrás, hacíamos en un puesto fijo de oficina. Y un importante número de organizaciones ha constatado que el logro de sus objetivos de crecimiento y otros indicadores no se han visto alterados; algunos incluso los han visto crecer. Ese era uno de los temores centrales de muchas industrias.

Así entonces, en éste mundo inmensamente cambiante, resulta clave diseñar planes y estrategias, con una mirada ágil y flexible que permitan asegurar la continuidad del negocio, minimizando riesgos y resistencias a cambios o modificaciones en el modo de operar.

Éste será el principal desafío a sortear de quienes deseen mantenerse operando de forma segura y competitiva.  De manera interna requerirá de una importante capacidad adaptativa, estratégica y orientación a objetivos de alto estándar, tanto de manera individual como grupal y organizacional, por lo que se debe trabajar en su instalación, desarrollo y fortalecimiento.

Convertir este desafío en una oportunidad de crecimiento será el sello que nos distinga de la competencia.

Let´s go!